Hombres y mujeres lo sufren en algún momento de la vida y no son pocos los que lo experimentan con mayor intensidad, pudiendo ser causado por diferentes factores, incluso por una mala pisada.
Los especialistas concuerdan en que el dolor de esta articulación tiene más que ver con otras causas que con el frío. Por ejemplo, con el nivel de desarrollo de las sociedades. Hoy vivimos más que nuestros abuelos, somos más sedentarios o practicamos deportes de más impacto para las rodillas como el esquí, el fútbol o el running, entre muchos otros.
Si a eso le sumamos la epidemia de obesidad que vivimos, pareciera que este dolor es inevitable. Tanto que se estima que, por ejemplo, en Estados Unidos representa la tercera parte de las consultas traumatológicas.
Las rodillas son las articulaciones que nos permiten caminar, saltar, correr entre muchos otros movimientos cotidianos. Y si bien el sedentarismo es peligroso para ellas también lo es el abuso del ejercicio, especialmente en aquellas prácticas que las obligan a soportar una mayor presión.
Un buen calentamiento previo así como la realización regular de ejercicios para fortalecer la musculatura de los muslos disminuyen el riesgo de lesiones. Los kilos de más también son responsables del daño en nuestras rodillas, encargadas de sostener nuestro cuerpo.
Otro enemigo, para las mujeres, es el uso de tacos altos que obligan a dar pasos cortos, con las rodillas semi-flexionadas. Ya avanzada la edad, la artrosis –la patología músculo-esquelética crónica más frecuente- se convierte también en un factor de riesgo. La artrosis es el desgaste del cartílago de la articulación, una enfermedad común, que avanza lentamente y va empeorando la sensación de dolor.
Dolor de rodilas y cómo prevenir
Si sientes dolor de rodilla debes ir al traumatólogo para que evalúe si existe alguna lesión o enfermedad que pueda provocarlo. Fortalece los músculos de las piernas para prevenir lesiones.
Realiza siempre ejercicios de elongación antes de iniciar alguna actividad física.
¿Cuándo ir al doctor?
Debes consultar siempre que:
- Que el dolor aparezca sin que hayas sufrido un traumatismo en la rodilla. Especialmente si tienes sobrepeso o más de 60 años.
- Si al doblar la rodilla sientes un chasquido o sensación de bloqueo.
- Si experimentas pérdida de capacidad funcional importante, rigidez u otra limitación que no tenías antes.
- Si practicas deportes y experimentas molestias, suspende el entrenamiento y consulta al especialista.
Recomendaciones para evitar dolor de rodillas
- Practica deportes como la natación o anda en bicicleta, aliados de la articulación.
- Procura que el ejercicio sea suave y moderado.
- Tomar analgésicos o anti-inflamatorios puede ayudar en algunos casos, pero siempre es necesario que sean indicados por el médico.
- Baja de peso y no cargues objetos pesados.
- Si debes levantar objetos, recuerda hacerlo siempre con las rodillas flectadas.